El Señor Jesús profetizó: "Y á la media noche fué oído un clamor: He aquí, el esposo viene; salid á recibirle" (Mateo 25: 6). "He aquí, yo estoy á la puerta y llamo: si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré á él, y cenaré con él, y él conmigo" (Apocalipsis 3:20). "Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen" (Juan 10:27).