Dios lo ve todo desde lo alto,
y domina todo desde allí.
Al mismo tiempo, Dios ha bendecido la tierra con Su salvación.
Dios está vigilando siempre desde Su lugar secreto,
cada acto del hombre, todo lo que dicen y hacen.
Dios conoce al hombre como a la palma de Su mano.
El sitio secreto es la morada de Dios,
el firmamento es la cama donde Él descansa.
El poder de Satán no afecta a Dios,
porque Él está lleno de majestad, justicia y juicio.
Cuando no entiendes a Dios, ni conoces Su carácter,
no podrá abrirse tu corazón de verdad a Dios.
Cuando entiendas a tu Dios, entenderás qué hay en Su corazón,
y probarás lo que hay en Él con toda atención y fe.
Cuando pruebes el corazón de Dios, poco a poco, día a día,
cuando pruebes lo que hay en Su corazón, abrirás tu corazón a Él.