Al cumplirse las palabras de Dios, el reino toma forma.
Al volver el hombre a ser normal, el reino de Dios está aquí.
Pueblo de Dios, en el reino, recobrarás la vida destinada a la humanidad.
Hoy vives ante Dios; mañana vivirás en Su reino.
Los pueblos se llenan con gozo y calor.