Durante los últimos días Dios se ha encarnado en China para obrar y ha expresado millones de palabras, y ha conquistado y salvado a un grupo de personas con Su palabra y ha iniciado la nueva era del juicio, comenzando con la casa de Dios.
Cuando habla del regreso del Señor Jesús, Él dijo: “Entonces, vosotros también debéis estar listos porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que menos lo penséis” (Lucas 12:40).
Mi misericordia es para los que me aman y se niegan a sí mismos. Y el castigo traído sobre los malvados es una prueba de Mi justo carácter y, más aún, testimonio de Mi ira. Cuando llegue el desastre, el hambre y la peste caerán sobre todos aquellos que se oponen a Mí y llorarán.